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Consejos para ser eficaz en el teletrabajo

El confinamiento ha hecho proliferar el trabajo desde casa, y hay diversas formas para conseguir ser productivo.

Consejos para ser eficaz en el teletrabajo
Por Beatriz Prieto | Publicado: Viernes 26 Junio 2020 17:18

Trabajar desde casa no es precisamente una novedad en el mundo laboral actual. No obstante, la crisis del Covid-19 y la cuarentena han empujado a muchos empleados a introducirse en el mundo del teletrabajo, quizás por primera vez en sus vidas. Con unas tecnologías que permiten la buena comunicación entre los trabajadores y que facilitan en muchas ocasiones el trabajar sin desplazarse, el teletrabajo ha ido ofreciendo numerosas ventajas con el paso de los años.

Algunos consejos pueden ayudar a la hora de trabajar mejor desde casa

Algunos consejos pueden ayudar a la hora de trabajar mejor desde casa

Como muchas otras cosas, trabajar desde casa también supone algunos inconvenientes, especialmente dependiendo de cada situación personal en la que se encuentren los trabajadores. No obstante, existen algunos consejos generales que pueden ayudar a hacer del teletrabajo algo provechoso y más llevadero, incluso tan productivo como trabajar desde una oficina o un ambiente más "laboral", a pesar del cambio de ambiente al que nos vemos sometidos.

1 Establece una rutina y un horario definido

Al no estar en un ambiente que motive el trabajo como puede ocurrir en una oficina, una de las primeras cosas que hay que tener claras a la hora de teletrabajar es la necesidad de tener cierta disciplina. Establecer o mantener la rutina diaria supone un refuerzo a la hora de aplicarse con eficacia, especialmente cuando puede favorecer que nuestra mente relacione dicha rutina con la motivación para trabajar, aunque el entorno haya cambiado, o a que nos acostumbremos a mantener el mismo ritmo. Además, dentro de esa misma rutina, no es recomendable empezar a la jornada laboral nada más despertarse: es preferible otorgarnos un tiempo para dedicarlo a la rutina que manteníamos antes, cuando nos desplazábamos a nuestro lugar de trabajo, o dedicar un tiempo previo a comer, ducharnos u otras tareas, con el fin de despejar nuestra mente y asegurarnos de que estemos activos a la hora de ponernos a manos a la obra.

Otro de los aspectos esenciales a la hora de conseguir ser eficaz en el teletrabajo, es el hecho de marcarse un horario de "entrada" y de "salida" definido, tanto a nivel personal como en relación a los compañeros y/o la empresa, con el propósito de evitar contactos o encargos fuera del horario laboral. Y es que, al encontrarnos en nuestra propia casa, no sorprende que uno pueda albergar la tendencia a trabajar más tiempo del que le corresponde, incluso sin ser consciente de ello. Una circunstancia que no es nada recomendable, dada la importancia que tiene el hecho de dedicar tiempo también al ámbito personal, más allá del ámbito profesional. Aunque uno lleve bien el centrarse en el trabajo unas horas de más durante días, lo cierto es que esa sobrecarga acabará teniendo consecuencias negativas tarde o temprano, entre ellas, podría aumentar el estrés o provocar un agotamiento físico y mental que, a la larga, repercutirían negativamente en nuestro trabajo.

2 Evita trabajar en pijama

Puede parecer un consejos muy básico, incluso algo absurdo, pero lo cierto es que, el simple hecho de cambiarse de ropa a la hora de ponernos a trabajar, puede suponer un escalón más hacia una jornada satisfactoria y productiva. Trabajar con la misma ropa con la que dormimos no favorece el hecho de que seamos más activos, sino que puede motivar una actitud más adormilada e incluso invitar a la relajación, algo poco favorable para nuestra concentración y productividad. No obstante, renunciar a estar en pijama no implica que uno se deba vestir de la misma forma que se puede hacer a la hora de acudir al lugar de trabajo: basta con ponerse ropa cómoda que pueda desconectarnos del sueño y el adormecimiento, en pos de ayudarnos a empezar la jornada con energía o mantener la concentración.

3 Crea tu propio espacio de trabajo

A la hora de trabajar en casa, lo óptimo sería contar con las mismas comodidades y prestaciones que disfrutaríamos en nuestro lugar de trabajo. No obstante, en un hogar no siempre es sencillo disfrutar las mismas condiciones, por diferentes causas. Por ello, es recomendable mantener un espacio de trabajo lo más diferenciado posible con respecto al resto del entorno, ya sea en una habitación aislada o un determinado lugar de la casa. Un lugar permanente, inamovible, al que podamos acostumbrarnos con el tiempo y que acabemos asociando con nuestra faceta profesional, con el objetivo de fomentar cierta fidelidad a la rutina, al igual que nuestra concentración.

Asimismo, es importante que nuestro espacio sea ordenado, cuente con una buena iluminación (a ser posible natural) y disponga de una adecuada ventilación que nos ayude a mantener el ritmo de trabajo. El hecho de mantenerse apartado, a ser posible, de espacios relacionados con el ocio o la relajación, también puede convertirse en un incentivo a la hora de trabajar de forma productiva. Sobre todo, si nos mantenemos lejos de sofás o camas que nos pueden tentar a bajar la guardia en plena jornada laboral. Son elementos que, en general, nuestra mente no suele relacionar con el trabajo, por lo que podrían perjudicar nuestra dinámica.

4 Planifica tus jornadas

Al arrancar la jornada laboral, es muy importante planificar los objetivos a realizar a lo largo del día, especialmente si trabajamos desde casa, teniendo en cuenta las tareas prioritarias y los plazos de los que se dispone. Apartado de los compañeros, en un entorno más solitario, puede ser complicado encontrar la motivación adecuada y se corre el riesgo de dejarse llevar por la temida procrastinación. Tener en mente metas que puedas alcanzar a corto y medio plazo ayuda a mantener la concentración, aunque siempre con moderación. Después de todo, no ser realista con los cometidos que uno se propone realizar a lo largo del día, puede añadir una frustración y un estrés nada beneficiosos para nuestro trabajo y nuestra propia salud.

5 Mantente lejos de posibles distracciones

Trabajar desde casa supone desarrollar la profesión desde un entorno en el que solemos estar cómodos, un lugar en el que podemos hacer lo que queramos y que, en consecuencia, puede tener numerosas distracciones a la hora de ejercer nuestro trabajo. Por ese motivo, es imprescindible tener pequeños gestos para mantener la concentración, como no entrar en las redes sociales, la televisión o el uso del móvil para asuntos ajenos a la profesión. Además, el hecho de trabajar en casa puede incitarnos a estar pendientes de las tareas del hogar al mismo tiempo, algo que sería preferible eludir, de ser posible, con el fin de que la atención no se nos disperse en demasiadas tareas al mismo tiempo.

Para conseguirlo, hay gente que opta por aplicar distintos métodos con los que poder evitar las distracciones, como puede ser escuchar música, sonidos de la naturaleza o asegurarse un cierto silencio a su alrededor gracias a cascos antirruido, opciones que pueden ser muy útiles para algunas personas a la hora de concentrarse y aislarse del entorno. También hay quienes optan por medidas más drásticas, recurriendo a aplicaciones que limitan el uso de aquellas apps que más nos absorben o, incluso, en caso de no precisar el uso de internet mientras, por ejemplo, escribimos un guion, hacemos un diseño o editamos un vídeo, apagando la conexión durante un tiempo para sortear posibles tentaciones.

6 Ten en cuenta las pequeñas pausas

El hecho de no realizar tareas domésticas, ver la televisión o entrar en las redes sociales mientras uno trabaja, no implica que no se puedan establecer algunas pausas a lo largo del día para dedicar unos minutos a dichas actividades. De hecho, realizar algún que otro descanso a lo largo de la jornada es más que recomendable, sobre todo cuando uno logra desconectar de verdad. Algo que, al carecer de compañeros de trabajo en el entorno, puede ser más difícil de cumplir si uno se concentra en exceso en sus tareas y no cuenta con alguien que le anime a tomar un breve respiro de vez en cuando.

Hacer breves pausas a lo largo de las horas de trabajo puede ser muy beneficioso, dado que llevar a cabo una tarea durante demasiado tiempo, sin pausa, y manteniendo una misma postura, puede adormecernos o hacernos caer en el tedio y, en consecuencia, corremos el riesgo de ser menos productivos. Aprovechar unos minutos para estirar los músculos, para comer algo o para dar cortos paseos por la casa, entre otros muchos ejemplos, pueden ayudarnos a despejarnos, a oxigenarnos e incluso evitar asuntos tan peliagudos como la fatiga visual. Actividades sencillas que favorecen que volvamos al trabajo renovados, al igual que puede ayudarnos también el hecho de salir de casa antes y/o después de cada jornada laboral, ya sea para tomar el aire o para hacer ejercicio.

7 No pierdas el contacto con tus compañeros

Trabajar en casa puede hacernos más propensos a aislarnos del resto de nuestro entorno profesional, lo que a la larga puede pasarnos factura. Por eso, trabajes o no en equipo, es recomendable mantener el contacto con tus compañeros, incluso durante los descansos que tomes a lo largo del día, ya sea a través de aplicaciones de mensajería o de videoconferencia. Dichos contactos pueden formentar el cuidado tanto de la relación profesional como la personal, algo muy importante en el entorno laboral, especialmente a la hora de trabajar en grupo. Interactuar con otras personas, sobre todo si son cercanas, siempre viene bien y supone en muchas ocasiones una válvula de escape, tanto en lo relativo a temas de trabajo como aquello relacionado con asuntos más personales. Podríamos llegar a entablar conversaciones que, incluso, nos ayudaran a aclarar nuestras ideas, tomar decisiones o fomentar nuestra creatividad, algo muchas veces fundamental en el mundo audiovisual.