En los últimos años, ha tomado mayor protagonismo en las compañías la técnica del Design Thinking. Probablemente hayas oído hablar de ella y de sus grandes beneficios en alguna ocasión, pero se te escapen algunos retazos de cuál es su objetivo final. El Design Thinking es un método de acción creativa que busca innovar en un ámbito. Pero todo está controlado, y es que para llegar a las soluciones hace falta un desarrollo por parte de todos los miembros y, con un poco de tiempo, se puede conseguir mejoras en todo lo que te propongas.
Un entorno libre de juicios ayudará a llevar a cabo una sesión de Design Thinking
Aunque al principio te pueda costar adentrarte en esta metodología, una vez que la has probado seguro que notas sus beneficios y querrás utilizarla para cualquier otra problemática que te surja en tus proyectos creativos. La grandeza del Design Thinking reside en emplear la imaginación para liberarse de la lógica y de lo mecánico que solo bloquea tu mente. Por ello, y para facilitar tu primera toma de contacto, te traemos una serie de consejos para que tus sesiones de Design Thinking sean un auténtico éxito.
1 Prepara a tu equipo para la sesión
El Design Thinking es una herramienta para trabajar en equipo, ya que las revelaciones que nazcan de la sesión, también conocidas como insights, surgen por la puesta en común de todos los miembros. Es importante preparar al equipo, que conozcan cómo funciona la metodología y que dejen atrás cualquier prejuicio sobre lo que puede salir a la luz durante el ejercicio.
2 Fuera distracciones
En cualquier sesión que se realice, ya sea de Design Thinking o de otra técnica, es necesario estar completamente centrado en el trabajo. Las distracciones solo consiguen sacarte fuera del completo éxito en el proyecto. Por eso, es muy importante dejar los teléfonos a un lado. La imaginación es la herramienta principal que vas a utilizar y por ello la única que necesitas tener contigo.
3 Confía en ti
Es muy probable que al tratarse de un trabajo donde predomina la imaginación tengas miedo de no estar a la altura. No te preocupes, no vas a estar solo en el proceso. Todo tu equipo está contigo y puede sentirse exactamente igual que tú, así que comparte con ellos cómo te sientes y recuerda que os encontráis en el mismo barco remando juntos hacia una solución.
4 Siéntete libre
Una de las principales bases del Design Thinking es el brainstorming y para ello es necesario soltar todas las ocurrencias que pasen por tu cabeza. No tengas miedo en decir cualquier cosa, por muy insignificante que creas que pueda ser. Uno de tus compañeros quizá puede tirar de ese hilo y juntos encontrar la revelación que estabais buscando.
5 No juzgues
Del mismo modo que no quieres sentirte juzgado y tener la libertad para poder expresar todas tus ideas, haz lo mismo con tus compañeros. Para que la dinámica funcione a la perfección, es necesario que dejes libertad a los demás para contar sus impresiones y generar un clima de confianza.
6 Tomaos el tiempo que haga falta
No os preocupéis si pensáis que estáis tardando más de la cuenta en encontrar las revelaciones. Entran en juego muchos factores externos que no pueden controlarse, por lo que igual hay sesiones más fructíferas que otras. Lo importante es que no perdáis la motivación ni la confianza en vosotros mismos. Tarde o temprano llegaréis a la solución.
7 Elegid la herramienta que mejor se adapte a la sesión
No hay una herramienta correcta a la hora de enfrentarse a una sesión de Design Thinking. Según tu problemática, e incluso según con quién trabajes, puede funcionar una mejor que otra. O incluso todas. No te cortes en emplear todas aquellas que creas conveniente, lo importante es sacarle todo el jugo posible a la sesión y obtener el mayor número posible de revelaciones.
8 Seleccionad las revelaciones para mejorar tu proyecto
Finalizado el ejercicio tendréis varias revelaciones adquiridas de la puesta en común de todas las mentes de los miembros del grupo. Seleccionad aquellas que mejor se adapten a lo que buscáis del proyecto y que pueden ayudaros a potenciar aspectos de él que, hasta ese momento, no habíais sido capaces de ver. Ahora solo queda convertir esas revelaciones en auténticos avances.