Gracias al auge y desarrollo de las nuevas tecnologías, no han dejado de crecer las posibilidades de que un profesional de cualquier campo se acabe dando a conocer. Ya no solo está la presencia de las redes sociales o las distintas webs que permiten compartir contenido, sino que ahora mismo contamos con una herramienta que puede ser una excelente herramienta para demostrar nuestra valía como profesionales del mundo audiovisual: los podcast.
Existen una gran variedad de podcast especializados en multitud de campos
La llegada de este formato de audio a España se dio por primera vez en octubre de 2004, apenas unos meses después de que surgieran en Estados Unidos y, desde entonces, ha ido calando poco a poco entre la población española. Los datos aún están lejos de los que poseen países como Estados Unidos, donde uno de cada cuatro estadounidenses escucha al menos un podcast todos los meses, según datos de Edison Research de 2017. Sin embargo, el formato sigue una tendencia al alza que ha cambiado especialmente con la crisis del Covid-19 y la posterior cuarentena: mientras que en Estados Unidos su consumo se ha reducido en un 20%, en España ha sufrido el efecto contrario, subiendo un 25%, según los datos recogidos en "The State of the Podcast Universe", publicado por VoxNest.
El hecho de que el podcast sea un formato accesible al que uno puede prestar atención en cualquier momento, es una de las características que ha favorecido su auge. Escuchar el contenido que deseamos en cualquier momento o situación supone un incentivo para que la gente se anime a disfrutar de su amplia variedad de contenidos . De hecho, tal y como pronostica Deloitte, la creciente expansión de los podcast podría suponer un negocio de más de 3.300 millones de dólares en 2025, un gran contraste con respecto a los 45 millones que se cosecharon en 2013. Ante el aumento del éxito del formato y el hecho de que suponga una oportunidad perfecta para desarrollar nuestra carrera profesional en el mundo audiovisual, recogemos los pasos esenciales que hay que dar a la hora de embarcarnos en el rico y creciente mundo del podcast.
1 Elige el tema de tu podcast
Desarrollar un podcast requiere tiempo y dedicación, por lo que es importante tener en cuenta el tema al que nos vamos a dedicar. Si es un asunto que realmente nos interesa y del que tenemos bastante conocimientos, puede suponer un gran incentivo a la hora de crear nuestro propio formato y, además, se verá reflejado en el resultado, dado que uno tiende a trabajar mejor en algo que disfruta. Además, no tenemos que preocuparnos en exceso por los potenciales seguidores que podamos adquirir con nuestra materia elegida: aunque cuente con menos seguidores en el mundo del podcast, es más que posible que sean mucho más fieles a nuestro contenido, lo que podría ayudarnos a crear cierta "comunidad" alrededor de nuestro trabajo.
No obstante, siempre podemos tener en cuenta cuáles son los temas más populares entre los consumidores de podcast y adaptarnos a ello según nuestros intereses, con el fin de adquirir oyentes quizás con mayor facilidad, aunque escoger una materia que no nos despierte suficiente interés podría hacer que peligrara nuestro proyecto y su continuidad. Aun así, hay que tener en cuenta el oyente potencial al que nos estaríamos dirigiendo: no es lo mismo crear contenido sobre el mundo de los videojuegos, cuyo público es sobre todo joven; que hacerlo sobre cine clásico, una audiencia que es probable que tenga mayor edad. Por ello, siempre es recomendable estudiar el mercado en el que nos vamos a introducir, con el fin de adaptar nuestro contenido para que encaje con lo que la mayoría de la gente a la que nos dirijamos pueda estar buscando.
2 Define su estructura
Una de las cosas que tenemos que tener en cuenta a la hora de preparar nuestro podcast es la estructura que va a tener: si lo dividiremos en secciones, si contaremos con otras personas, si será un podcast de entrevistas, de debates o un monólogo… multitud de opciones que es preferible determinar al empezar, para facilitar el seguimiento, aunque siempre se puede "romper" algo de rutina, para evitar cierta "monotonía".
Asimismo, es importante marcarnos una meta en cuanto a la publicación periódica de nuestro podcast, con el fin de mantener cierto compromiso con nuestros seguidores. Al comenzar, no podemos ponernos una meta inalcanzable: un podcast requiere trabajo y comprometernos, por ejemplo, a publicar dos episodios cada semana, podría ser misión imposible si tenemos que compaginarlo con otros compromisos. Por ese motivo, es esencial tener claro cuánto tiempo podemos dedicar no solo a su grabación, sino también a su preparación, y más aún si contamos con la colaboración de terceras personas con las que tenemos que quedar para grabar. Con el fin de evitar que posibles imprevistos nos retrasen la publicación de un episodio, siempre es recomendable contar con algunos podcast extra ya grabados, para evitar posibles retrasos.
Otro aspecto relevante a determinar a la hora de crear nuestro podcast es el tiempo que durará. Para ello, hay que tener presente cómo vamos a presentar nuestro contenido: no es lo mismo hablar entre diez y veinte minutos tú solo, que hacerlo con más personas, dado que en este caso podría ser una duración muy corta. En el caso contrario, grabar uno solo durante media hora o incluso una hora, podría dar lugar a un episodio muy pesado, incluso aunque contemos con una materia muy atractiva y recursos como pausas o música. Un tiempo que, en el episodio de estreno, es recomendable dedicar por completo a hacer una introducción de nosotros mismos y de nuestro proyecto, indicando cosas qué buscamos al elaborar y compartir nuestro podcast. Es, de hecho, el momento perfecto para conectar con nuestros futuros seguidores.
Por supuesto, es importante concretar, dentro de los minutos que dure nuestro programa, cuánto dedicaremos a cada parte de la estructura, con el fin de controlar el tiempo que grabamos y no pasarnos o quedarnos cortos. Es esencial que, dentro de cada episodio, contemos con tres partes diferenciadas: la introducción, de entre dos o tres minutos, donde te presentas y recogemos el contenido que vas a tratar, e incluso puedes aprovechar para promocionar tus servicios o hablar de tu patrocinador, en caso de tenerlo; el cuerpo, parte en la que recoges la materia que quieres tratar según el orden y la forma que creas oportuna; y la despedida, en la que no solo cierras el episodio, sino que también puedes invitar a tus oyentes a seguirte en redes o suscribirse a tu podcast, entre otras cosas.
3 Prepara un equipo adecuado
Aunque no seamos profesionales en el mundo del sonido, es importante que a la hora de grabar nuestro podcast tengamos disponible, al menos, un equipo básico de grabación y edición para nuestro programa: un ordenador, unos auriculares (para comprobar que captamos el sonido adecuadamente), un micrófono y un software de grabación. La captación del sonido es muy importante, por lo que debemos asegurarnos de que captamos el sonido adecuadamente, independientemente del micrófono que utilicemos: una mala grabación puede echar a perder el podcast, sin importar lo interesante que sea su contenido.
En el caso de los micrófonos, existe una gran variedad. Podemos contar con el que incorporan algunos auriculares de los smartphones, a modo de micrófono de solapa, pero siempre es preferible contar con un dispositivo más profesional, sobre todo si acabamos embarcándonos en un proyecto a largo plazo y no se trata de un mero pasatiempo o algo temporal. Para el primer caso, podemos contar con dos opciones básicas en el mundo de los micrófonos: los USB, que se conectan al ordenador y son bastante económicos, y los XLR, que poseen una conexión analógica que requiere una mesa de mezclas. A ellos podemos añadir complementos básicos, como un antipop, una membrana que absorbe los golpes que puede producir nuestra voz; o un pie de micro, con el fin de mantenerlo estático y evitar que se cuele el sonido que producimos al movernos. Dos de las muchas opciones que existen para asegurarnos de que el sonido sea lo más agradable posible a lo largo de nuestras grabaciones.
En cuanto a los softwares de edición y grabación a los que podemos recurrir, existe una gran multitud de ellos y, la mayoría, están dispuestos de forma gratuita. Uno de los programas más conocidos y básicos para grabar y editar sonido, es Audacity, aunque existe una larga lista de opciones, entre las que se encuentran otros como GarageBand, programa incluido en los Mac; o incluso Adobe Audition, programa hermano, profesional, de otros como After Effects o Photoshop, que es de pago, aunque cuenta con pruebas gratis por tiempo limitado y, dado su nivel y complejidad, requiere de mayores conocimientos a la hora de grabar y editar nuestro podcast. Además, la oportunidad de editar nuestra grabación supone perfeccionar lo que hemos captado, no solo eliminando ruidos, normalizando el volumen o introduciendo música, sino también, por ejemplo, eliminando silencios demasiado largos o momentos en los que nos hayamos equivocado durante la locución.
4 Ten en cuenta la importancia de la imagen
Una de las primeras cosas que verán nuestros potenciales oyentes es la carátula de nuestro podcast, nuestra imagen, cuya calidad y comprensión debe ser clara y atractiva tanto en un gran tamaño como en uno más pequeño. Por esa razón, debe poseer un buen diseño y ser atractiva, además de transmitir la esencia de tu proyecto y poseer una tipografía legible dentro de un tamaño de imagen concreto, determinado por la plataforma de podcasting que vayamos a utilizar. En caso de no contar con dotes para crear una imagen atrayente adecuada, siempre podemos contratar a alguien para que lo haga o, como opción más económica, recurrir a plataformas como Fiverr o Geniuzz, en las que puedes encontrar trabajos sencillos por unos cinco dólares.
A la importancia de la imagen se une la que posee el título de nuestro podcast: un título atractivo y acorde con nuestro contenido ya suma puntos a la hora de captar la atención de nuestros potenciales oyentes. A ello se suma la descripción, también con gran peso, en la que es fundamental convencer a dichos seguidores en potencia para que escuchen nuestro podcast. Aportar información sobre el programa incluyendo detalles como el calendario de publicación, los invitados o el tipo de contenido que tiene cada episodio suponen un plus, aunque no conviene extenderse demasiado, dado que una larga descripción no invita precisamente a ser leída. En ella también debemos incluir las palabras clave relacionadas con el contenido de nuestro podcart, con el fin de facilitar que este sea encontrado con mayor facilidad.
5 Publica y da visibilidad a tu podcast
Una vez tenemos grabado y editado nuestro podcast, es el momento de subirlo al servidor donde iremos alojando nuestros episodios, en formato MP3. Para ello, existen plataformas de alojamiento como Libsyn, Soundcloud, Spreaker o iVoox, las tres últimas también conocidos sitios de podcasting. Mientras que las tres primeras cuentan con versiones gratuitas limitadas (aunque merece la pena ajustarse a una de las opciones de pago si tienes intención de crear un proyecto sólido), iVoox no tiene un número limitado de episodios que puedas subir, una ventaja con respecto al resto.
En los casos mencionados, es necesario contar con una cuenta personal para añadir tus podcast, y es la propia plataforma la que te explica los pasos a seguir para incorporar tu contenido. Plataformas como iTunes o Stitcher, en cambio, requieren que indiquemos nuestro feed RSS, que se encuentra en nuestra plataforma de alojamiento y el primero incluso necesita que cuentes con hasta tres episodios y pueden tardar varios días en responder tu solicitud para añadir tu contenido a la plataforma. Spotify, en cambio, solicita un formulario de aceptación, además de tener una cuenta en sitios como Libsyn, Blubbry o Audioboom, entre otros.
Una vez publicado nuestro trabajo, es fundamental darle visibilidad fuera de la plataforma o plataformas que hayamos elegido para lanzarlo. Es normal que, al comenzar, contemos con pocos oyentes, razón por la que es tan esencial tener una "rutina" a la hora de publicar episodios y mantener un feedback más o menos constante con nuestros seguidores, con el fin de crear una comunidad que esté al tanto de tu contenido.
Además, compartir nuestro trabajo a través de las redes es una buena forma de darnos a conocer, al contar con aplicaciones tan populares como Twitter, Instagram, TikTok, Faceboook o incluso Youtube, con millones de usuarios en todo el mundo y las cuales facilitan también que mantengamos un contacto fluido con nuestros seguidores. Otras formas de potenciar el alcance de nuestro trabajo, ya lejos de las redes sociales, podría ser elaborar una web o un blog que lo acompañe o contar con buenas o importantes colaboraciones con las que no solo enriquecer el podcast, sino también multiplicar la proyección que pueda tener tu trabajo.
6 Monetiza tu trabajo
Los comienzos casi nunca son fáciles, por lo que es normal que, en los inicios de nuestro podcast, es muy común que no logremos conseguir dinero con nuestro trabajo. Sin embargo, una dedicación constante y la calidad de los episodios y su contenido pueden ir creando una buena comunidad que nos ayude a seguir adelante con el proyecto al obtener beneficios no solo personales y profesionales, sino también económicos. Una de las opciones más básicas para conseguirlo es ofreciendo productos o servicios, más allá del podcast pero relacionados con él, para vender a nuestra audiencia. Para conseguir clientes, suele ser una buena estrategia el regalar algunos de ellos, con el fin de generar confianza sobre su calidad y nuestro servicio.
Otra opción es la afiliación, es decir, promocionar un producto determinado y recibir una comisión si, gracias a nuestro podcast, se produce una venta. Una estrategia muy similar al patrocinio, más dado en aquellos formatos que adquieren cierta fama con el tiempo, en la que se establece un importe a pagar según la audiencia que tengas, a cambio de que tú promociones un producto o servicio en tu podcast, normalmente relacionado con el tema que tú tratas en el mismo, dado que se comparten los mismos clientes potenciales.
Además, cuando uno va adquiriendo cierta fama y un mayor número de seguidores, existe la opción de crear contenido Premium, además del que hagas normalmente, a cambio de cierto aporte económico. En este caso, es importante contar con una comunidad bastante grande, dado que esta opción suele ser aceptada por una pequeña parte de la audiencia y requiere un trabajo extra al que se le puede sacar partido. Es algo parecido a lo que supone crear una suscripción para fans, caso en el que se pueden otorgar ciertas ventajas a aquellos que paguen una cantidad de dinero determinada, como pueden ser el acceso a episodios antes de tiempo o escuchar contenido sin publicidad. En última instancia, estarían los contratos de exclusividad como iVoox originals, por los que la empresa establece un acuerdo con nosotros, como podcaster, por el que se paga una cantidad determinada al mes a cambio de que nuestro contenido sea publicado únicamente en su plataforma. Distintas estrategias que pueden favorecer la adquisición tanto de seguidores como de prestigio para nuestro podcast.